Les propongo pasar un fin de semana para estar en zapatillas, pero ponerle un toque de glamour, al menos con una pashmina de lana de alpaca si es invierno o algo más fresco si fueran en verano.
La Bamba de Areco hace perfecto honor al origen de su nombre que procede de “Bahamba”: Lugar de reposo y hospitalidad. Y eso es exactamente lo que uno siente al llegar a esta estancia, en San Antonio de Areco.
No es cualquier estancia, y si bien fui a varias, esta está entre mis preferidas. En 1970 fue declarada monumento histórico por la ciudad de San Antonio de Areco y fue una de las primeras estancias en abrir sus puertas al público en la década de los 80.
La Bamba cuenta con 11 habitaciones, de estilo colonial, pero combinando diseño antiguo con moderno, y uno de los datos de color, es que cada habitación lleva el nombre de algún caballo de polo famoso.
En la foto de la presentación me van a ver en La Pulpería, que es el edificio de la estancia más antiguo de todos, del siglo XVIII. Un lugar auténtico con el agregado de varias obras de arte y decoración autóctona, que logran el efecto querido por sus dueños. Hay fotografías de Aldo Sessa y cuadros de Alejandro Moy.
Obviamente, como una espera de cualquier estancia, al llegar, luego de unos aperitivos y una picada, es recibido con un buen asado y de yapa…… un concierto folklórico en privado. A pedido del público, puede cantarnos la canción que queramos! Acá todo el mundo disfruta de lo que hace y se nota y se contagia, nada se mide por reloj (bien pueden guardarlo en el bolso al llegar), todo puede durar el tiempo que uno quiera y disfrute.
Estar en La Bamba, es una mezcla de viaje al pasado, con toques del presente y modernismo en su ambientación, pero sin perder su característica principal. Una auténtica estancia, donde además de poder ver domas y otros espectáculos, uno tiene los caballos a su disposición. Los carruajes, como ven en las fotos, son también parte del atractivo.
Nada en este lugar está librado al azar: cuidado en cada detalle … eso sí, quien está libre de hacer lo que quiera es el huésped, puede leer, dormir, disfrutar del ambiente, o tener un fin de semana súper activo con las miles de propuestas que la gente del lugar nos ofrece. “Reposo y hospitalidad” asegurados.significa “lugar de
